Alo Yoga RD: mi experiencia en su primera tienda en Santo Domingo

Pocas veces un código de vestimenta me emociona tanto como cuando vi “Athleisure” en la invitación de la apertura de la primera tienda de Alo Yoga en República Dominicana. El evento fue en Blue Mall, justo un día antes de la apertura oficial, y te puedo decir que sí, fue uno de esos encuentros que se sienten como un mood board en vivo.

Había tragos con tequila servidos en vasos dignos de Pinterest, con hielos que llevaban impreso el logo de la marca —detalle que no se olvida. Un DJ puso la vibra exacta, hubo live lettering personalizado en vasitos de Alo (me encantó el mío con mi nombre), y hasta una sesión de yoga en vivo que nos recordó que sí, el cuerpo también quiere moverse bonito.


La tienda en sí es un oasis minimalista, con ese equilibrio entre lujo relajado y energía activa que define tan bien a la marca.

La única cosita que me dejó con un “chin” (como decimos en RD) de desencanto —muy leve, lo juro— fue que justo días antes había visto la nueva colección en tono buitre yellow en su página web, y decidí esperar para comprarla directamente aquí, en casa, y en la inauguración (ojo, manejan los mismos precios). Pero cuando llegué, esa colección aún no estaba disponible. El equipo, que es un súper team liderado en tienda por la reconocida estilista de moda dominicana Gina Terc, me aseguró que pronto llegaría.

En fin, fue un evento que mezcló estilo, comunidad y movimiento, como debe hacerlo una marca que entiende que hoy no solo vendes ropa: vendes pertenencia.

Airam ToribioComentario